LA EMPRESA Y SU CONTROL INTERNO
PARTE 2:
El control con un enfoque de sistemas.
¿Qué es un sistema? En el diccionario de la RAE se define de la siguiente manera:
Cuando miramos a un individuo en la naturaleza, observamos que en sí mismo es un universo, y por analogía es un sistema.
En este contexto, observamos también, que una empresa funciona como un sistema; es decir, es un conjunto de cosas (procesos) relacionadas entre sí, y que, de una manera ordenada, con principios y reglas entrelazados, se logran ciertos objetivos determinados.
En otras palabras, los componentes de un “sistema” denominado empresa, se convierten a su vez, en un conjunto de sistemas, subsistemas o procesos, que a su vez tienen objetivos que cumplir.
Cuando una empresa se entiende, y se gestiona a través de procesos, es mucho más probable que alcance sus objetivos. Esto permite la sostenibilidad en el transcurrir de los años.
Hágase la siguiente pregunta:
La respuesta no es sencilla, porque hay una buena cantidad de factores y razones; sin embargo, en mi opinión, cuando una empresa se gestiona por procesos, con principios, objetivos claros y un sistema de control interno funcional, es mucho más probable que subsista en el tiempo. Tener definido el camino y contar con un sistema de control inherente, son factores fundamentales.
Se dice fácil. Llevarlo a la práctica es el reto de un liderazgo de alto nivel.
Para entender un sistema de control interno, en primera instancia hay que entender los procesos que interactúan en la empresa, y luego, entender de qué manera las actividades del control interno como un proceso, están inmersas en todos los procesos operacionales y directivos de la empresa.
Para esto, se debería comprender lo siguiente:
Un sistema es un conjunto de elementos (procesos) relacionados con un propósito; es decir todo sistema tiene objetivos a lograr, y todo proceso también tiene objetivos a lograr, los cuales contribuyen, al logro de objetivos del sistema superior, es decir la empresa. A su vez, todo proceso es un conjunto de actividades.
En este contexto, el sistema de control debe lograr y mantener las condiciones deseadas, del sistema (empresa), de los procesos y de las actividades.
En un sistema de control existen cinco elementos básicos:
Desde el punto de vista de gestión por procesos, un sistema de control establece:
Hablaremos sobre los tipos de controles, más ampliamente en la siguiente oportunidad.