El grupo Ferrero anotó otro golpe de mercado bajo la administración de Giovanni Ferrero, presidente de la compañía homónima fundada por su abuelo Pietro en 1946. El grupo anunció la adquisición del negocio de galletas, bocadillos de fruta y helados de Kellogg Company por $ 1.3 mil millones.
El proceso de fortalecimiento del liderazgo de Ferrero en los sectores productivos tradicionales, desarrollado por el padre de Giovanni, Michele Ferrero, continúa, por lo tanto, como un verdadero arquitecto del crecimiento mundial del grupo Nutella, capaz de transferir su huella a lo largo de toda la cadena de valor, hasta a las relaciones con el personal.
Hace más de 40 años, Michele Ferrero escribió a los gerentes que él nominó, enumerando las reglas para el personal. Un documento que la Gazzetta di Alba, la revista semanal de la ciudad donde cobró vida la fábula de Ferrero, descubierto y publicado en las últimas semanas.
Este es un documento dirigido a los gerentes designados por Michele Ferrero, definido como el “máximo a seguir en los contactos con el personal”. Un documento que se abre con la siguiente frase: “Cuando hable con una persona, recuerde: él también es importante”.
Publicamos a continuación los puntos reportados en el documento, según lo publicado por la Gazzetta di Alba.
1-Pon a tus empleados a gusto en tus contactos:
-Dedicarles el tiempo necesario y no las “migajas”.
-Ten cuidado de escuchar lo que te dicen.
-No les des la impresión de que tienen problemas entre ustedes.
-Nunca dejes que se sientan “pequeños”.
-La silla más cómoda de tu oficina es para ellos.
2- Tomar decisiones claras y obtener ayuda de los empleados, ellos creerán en las decisiones que tomaron.
3- Hacer participar a los colaboradores de los cambios y discutirlos antes de su implementación con las partes interesadas.
4- Comunicar los comentarios favorables a los trabajadores, los desfavorables los comunican solo cuando es necesario, en este último caso no se limite a una crítica, sino que indique lo que debe hacerse en el futuro porque sirve para aprender.
5- Sus intervenciones sean siempre puntuales: “Demasiado tarde” es tan peligroso como “Demasiado temprano”
6- Actuar sobre las causas antes que sobre el comportamiento.
7- Considere los problemas en su apariencia general y no se pierda en los detalles, deje un cierto margen de tolerancia a los empleados.
8- Siempre ser humano.
9- No pedir cosas imposibles.
10- Admitir sus errores con serenidad, le ayudará a no repetirlos.
11- Preocuparse por lo que tus empleados piensan de ti.
12- No piensen en ser todo para tus colaboradores, en este caso terminarías siendo nada.
13- Cuidarse de los que te adulan, a la larga son más contraproducentes que los que te contradicen.
14- Siempre de lo que debe y recuerde que a menudo no se trata de cuánto, sino cómo y cuándo.
15- Nunca tome decisiones bajo la influencia de la ira, la preocupación, la decepción, la preocupación, pídalo cuando su juicio sea más sereno.
16- Recuerda que un buen líder puede hacer que un hombre normal se sienta como un gigante, pero un mal líder puede convertir a un gigante en un enano.
17- Si no crees en estos principios, abandona el liderazgo.
Fuente: Forbes, 2 de abril de 2019